¿Publicas contenido útil?
- 23
- oct
Un blog corporativo debe resultar interesante, ofrecer valor, es decir, contenido que le diferencie de los muchos otros blogs que pululan por la red. Tenemos que conseguir que los consumidores, muy hábiles en la detección de textos de calidad y en separar la paja de lo verdaderamente esencial, quieran seguir ese y no otro blog.
La clave reside en ofrecer información de calidad, original y redactada con mucho mimo. Hay quien recomienda hacerse eco de informaciones ya publicadas por otros o elaborar lo que se conoce como refrito de post anteriores, sin embargo, este tipo de prácticas suelen resultar poco efectivas, incluso dañinas a la larga, porque no hay nada peor que alimentar el interés de los lectores con un buen titular para después mostrarles un contenido que, seguramente, ya habrán leído a través de otras vías o meses atrás. En definitiva, el contenido habrá de estar a la altura del título del mismo y por supuesto, resultar novedoso. Introducir matices personales y dejar en tu blog la huella del espíritu empresarial que tratas de fomentar es vital para diferenciarte del resto.
Y recuerda, los canales de comunicación online no son estáticos ni unidireccionales, debes invitar a la conversación, a la participación y a que tus lectores pongan en práctica aquellos consejos o tareas que señalas. Para ello, es indispensable conocer el perfil de nuestro público (sus hábitos, gustos, preferencias, etc.). Y tan importante es nuestro público como el interés que mueve a nuestra empresa, sus objetivos, pues si queremos obtener resultados contantes y sonantes con nuestro blog corporativo deberemos tener muy claro que todas aquellas acciones que emprendamos y textos que publiquemos han de tener una finalidad afín a los mismos. En un blog empresarial, nada se deja al azar.