El futuro del contenido es de las tabletas
- 08
- ene
Ganan en autonomía frente a los portátiles, también en movilidad, en oferta de aplicaciones, conectividad y comodidad si nos atenemos al tamaño y peso, el uso habitual de las tabletas ha experimentado un crecimiento tal en los últimos meses que amenaza con desbancar, en cuestión de tres años, al portátil e incluso al teléfono móvil como soporte digital por excelencia. De hecho y según los expertos, si las ventas continúan al ritmo experimentado el pasado año, en 2017 las tabletas supondrán el 70 % de los dispositivos conectados.
El último estudio de la Sociedad de la Información en España, publicado por la Fundación Telefónica hace un año, señalaba que el 14 % de los españoles disponían de una tableta, cifra nada desdeñable si tenemos en cuenta que el documento situaba la media europea en el 7 %.
Consultar el correo electrónico, consumir contenidos audiovisuales online, actualizar nuestras redes sociales, mantenernos informados acerca de la actualidad cotidiana y del tiempo, jugar y leer libros son las tareas que reservamos a nuestra tableta según estudios como los presentados en 2013 por la consultora Gartner o la Universidad Internacional de La Rioja en su #informeTAB. Siempre conectada, siempre a mano, manejable y dotada de unas dimensiones perfectas para disfrutar sin dejarnos la vista y para escribir pequeños textos sin esfuerzo, las tabletas se han convertido en el aliado perfecto de ese usuario de clase media, urbano, amante de las apps y con una edad comprendida entre los 25 y los 44 años.
Tantas son las esperanzas puestas en el éxito de estos dispositivos que mientras los productores se afanan en desbancar al portátil añadiendo ventajas como teclados adaptables, empresas de servicios y medios de comunicación adecúan sus contenidos y estrategias de marketing a esta nueva herramienta, porque, al fin y al cabo, las tabletas, como el móvil, permanecen constantemente conectadas y nos acompañan en todo momento, incluso al baño, ¿pueden pedir algo más quienes buscan la fidelización de sus audiencias? Con la ventaja de que permiten mayor interacción que los teléfonos actuales.
En definitiva, desde una tableta podemos acceder a más servicios de forma simultánea y a más plataformas digitales, así que no sería de extrañar que en un futuro no muy lejano nuestros portátiles queden relegados a un segundo plano como herramientas de trabajo para desempeñar tareas muy concretas y especializadas, convirtiéndose las tabletas en una prolongación de nosotros mismos, una especie de memoria externa que ahora depositamos celosamente en nuestros móviles y ordenadores.
Adapta tus contenidos digitales a los dispositivos móviles
Siendo España uno de los países europeos con mayor expectativa de penetración de tabletas, la generación de contenidos exclusivos y adaptados a este tipo de dispositivos móviles se presenta como una necesidad acuciante. Y si bien es cierto que las herramientas han de estar al servicio del contenido y no al contrario, también lo es que cada dispositivo precisa de unas “normas” de edición y distribución si queremos que el mensaje llegue al receptor de forma satisfactoria, sin perder calidad, matices y eficacia por el camino, logrando así nuestros objetivos, ya sean promocionales, informativos o simplemente, conversacionales.
Explotar todas las posibilidades que nos ofrecen las tabletas, como la incorporación de aplicaciones orientadas a los servicios de una compañía o campañas publicitarias de realidad aumentada es otro de los grandes retos que deben afrontar las empresas si quieren rentabilizar su presencia en internet, así como la subsanación de problemas derivados de estas tecnologías, como una menor capacidad de almacenamiento.
A nadie se le escapa que no leemos igual en nuestro dispositivo móvil que en nuestro ordenador, cambian las preferencias, los gustos y los hábitos de lectura, porque no buscamos lo mismo en internet a las diez de la mañana desde nuestra oficina que a las diez de la noche desde la cama ni estamos del mismo modo predispuestos, por eso, han de variar nuestras estrategias de comunicación online y la forma de nuestros mensajes, pues debemos redactar contenidos digitales orientados a dispositivos móviles si nuestro objetivo es adaptarnos a las costumbres del usuario de tabletas.