Una respuesta a la encrucijada
- 06
- nov
La comunicación corporativa se encuentra en un punto de inflexión. Una vez más, la tecnología exige un cambio en la forma de producir y distribuir información, en la forma de entender el mercado, acorde con las expectativas de una demanda que hace de internet su principal canal de comunicación y de quienes nutren blogs y redes sociales, una fuente más que consultar y a la que brindar credibilidad.
Los blogs corporativos irrumpe con fuerza en el panorama comunicativo y el consumidor se torna más exigente: demanda más información, más variada y la demanda aquí y ahora.
Llegados a este punto, las opciones para gabinetes de comunicación y marketing tradicional son claras: evolucionar o perderse entre la multitud. El reto consiste en adecuar el mensaje a los nuevos formatos y soportes, delimitados por las redes sociales y los dispositivos móviles principalmente. Una vez más, el contenido debe adecuarse al continente mediante una apuesta clara y decidida.
Es en medio de ese proceso de acomodación donde nacen nuevas experiencias pensadas para facilitar la producción y distribución de información acorde con las bondades de la nueva era digital (sencillez, comodidad, cercanía, interacción, internacionalización, pluralidad, rapidez…) y de las necesidades de aquellas empresas que han entendido el valor de palabras como posicionamiento y conversación, en definitiva, que los fans de hoy serán los compradores de mañana.